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Sheik tarda más que los otros héroes en entrar a su misión. Por eso, tiene ventaja sobre ellos, porque ya ha oído hablar sobre lo que sucederá en ella. Al subir al barco e inspeccionar la cubierta, ve a un hombre llamado Rubeus discutiendo con el capitán acerca de un ataque de Wutai SA. Cuando se va, Sheik consigue engañar a Rubeus, haciéndole creer que es un amigo suyo llamado Gonzalo, para que se vaya.
Entonces, trata de abrir la puerta, pero está sellada mágicamente. Pregunta fingiéndose desesperado, a una mujer de la cubierta, si sabe dónde encontrar una materia barrera muerte, para romper sellos. Ella le señala a un hombre oriental, pero entonces Sheik se percata de que la coincidencia ha sido excesiva, y esquiva a tiempo un disparo. Varias personas, agentes de Wutai SA, se deshacen de sus difraces, incluida la anciana, que le ha robado a Skye.
La cubierta se convierte en un caos: la gente chilla, los de Wutai SA se hacen con el neo-mako , y una ola la inunda de monstruos. Uno, con forma de serpiente, o sea, Seadra, se dirige hacia los bidones. Sefi le dice a Sheik que debe tomar una decisión, y decide salvar a Skye y perder la misión. Skye hace levitar una roca sobre la que se sube Sheik, hasta quedar fuera de peligro.
En un peñón, contemplan cómo el barco explota. Algunas personas, Rubeus incluido, disparan inefectivamente a Metalseadramon, y Skye le aleja de allí lanzando una roca, aunque sólo tras haber convertido, el Seadra mutado, a los tripulantes en piedra.